Conexión profunda

Reflexología

¿Qué es?

Es una terapia manual y natural que, mediante la estimulación de los puntos reflejos en pies y manos que corresponden a todas las partes del cuerpo, estimula las facultades curativas latentes del cuerpo y ayuda a crear un estado ideal para un funcionamiento más eficiente, tanto a nivel físico, mental y emocional.

Origen:

Se cree que las raíces de la reflexología se remontan al antiguo Egipto por unos escritos que aparecieron en la tumba de un médico egipcio llamado Ankmahor y que datan del año 2500 a.c. A lo largo de los años se han venido practicando y desarrollando diversas formas de reflexología en América, África y el lejano Oriente.

No obstante, uno de los pioneros de la reflexología moderna fue el doctor William Fitzgerald que observó como los nativos americanos utilizaban técnicas de presión en unos puntos muy concretos para aliviar el dolor y decidió experimentar con sus propios pacientes estas técnicas con el resultado del descubrimiento de las líneas de energía que recorren el cuerpo lo que formó las bases de la moderna reflexología.

Beneficios:

  • Alivia los efectos del estrés, el miedo, la ansiedad y la frustración
  • Mejora el sistema inmunológico
  • Alivia molestias, dolores y malestares
  • Estimula la respiración y circulación, tanto la sanguínea como la linfática
  • Mejora los movimientos intestinales
  • Elimina las impurezas y las sustancias toxicas del cuerpo
  • Mejora la estimulación nerviosa
  • Aumenta la vitalidad y la confianza
  • Mejora la calidad del sueño
  • Reduce la tensión relajando la musculatura
  • Revitaliza la mente, el cuerpo y el alma

¿Quién puede beneficiarse de la reflexología?

Todos pueden beneficiarse de las múltiples ventajas de esta terapia. También:

  • Niños: Sus energías son más limpias y no llevan sobre sus espaldas la sobrecarga emocional que se va acumulando con los años, por lo que reaccionan a la terapia con más rapidez.
  • Personas mayores: Con los años nuestras energías corporales se ven afectadas por las preocupaciones, las enfermedades, dietas inadecuadas, malas posturas, estrés…  Esto hace que vayamos acumulando toxinas en nuestro organismo. El objetivo de la reflexología es eliminarlas e ir restableciendo un sistema corporal con más energía, más alegre y más eficiente.
  • Enfermos terminales: En estos casos, la reflexología puede ayudar para que cualquier dolor sea más soportable, a mejorar el sueño, a elevar el estado anímico y a reducir los efectos colaterales de la medicación.
  • Deportistas: Se trata de preparar al organismo antes de una actividad deportiva para aliviar la tensión psicológica de la competición, estimular los órganos para situarlos en el nivel más alto e intentar prevenir lesiones y efectos secundarios.

¿En qué consiste una sesión de reflexología?

Una primera sesión de masaje reflexológico consta de dos momentos esenciales: la inspección en detalle de todo el pie en busca de los puntos dolorosos, sensibles, desequilibrados  o que presenten cristales y el auténtico masaje. Esto nos permitirá evaluar el mejor protocolo a seguir, la intensidad, frecuencia y duración.

A partir de las siguientes sesiones, se realizará ya directamente el masaje terapéutico en función de la sintomatología. Cómo no existen reglas fijas, se pueden ir aportando modificaciones según las necesidades.

Contraindicaciones absolutas:

  • Enfermedades contagiosas
  • Fiebre
  • Gangrena
  • Primer trimestre del embarazo o en embarazos de alto riesgo
  • Trombosis, flebitis o linfagitis
  • Afecciones micóticas de la piel (hongos, papilomas, pie de atleta…)

Contraindicaciones relativas:

  • Insuficiencia renal
  • Afecciones tumorales
  • Taquicardia
  • Dolor abdominal inespecífico

Consideraciones a tener en cuenta:

El masaje debe realizarse fuera de las horas de digestión

Avisar si se tiene la menstruación o si cree que puede estar embarazada

Tipos de reflexología:

Hay muchos tipos de reflexología, pero las que proponemos son:

  • Pies
  • Manos
  • Rostro

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