Historia
El Masaje Facial Japonés hunde sus raíces en la Medicina Tradicional China, cuyos orígenes se remontan a los tiempos del emperador Huan Di (2697-2597 a.C). El Anmo o masaje (que significa empujar y frotar), forma parte esencial de sus tratamientos y tiene por objetivo el mantenimiento o restablecimiento de la salud, preservando constante y en equilibrio el flujo de energía (Qi) por todo el cuerpo a través de sus meridianos, que son como ríos que recorren el cuerpo transportando el Qi. Es el equilibrio de dicho flujo el que evitará la aparición de la enfermedad y su restablecimiento ayudará al cuerpo potenciando su sistema inmunológico.Hacia el año 1300 d.C. los conocimientos de la medicina china llegaron a Japón. El Anmo, (Anma en japonés) mantuvo fiel el objetivo de mantener el flujo de Qi para estimular la capacidad curativa del cuerpo. A través de los años el Anma fue especializándose y adquiriendo características propias y distintas de las del original Anmo.En 1.472 la Emperatriz de Japón, al solicitar sus tratamientos de belleza, requirió específicamente el masaje Kobido (antiguo camino de la belleza) convirtiéndose en un tratamiento exclusivo de la familia imperial.Según la tradición japonesa, la belleza es un reflejo del equilibrio entre mente, cuerpo y espíritu y este se refleja en el rostro.
Técnica
Kobido es un tratamiento facial ancestral japonés de rejuvenecimiento que ayuda a liberar la energía y la tensión bloqueada en los músculos faciales principales y del cuello. El masaje ayuda a rejuvenecer y reparar el tejido facial y previene y reduce el impacto del proceso del envejecimiento.Se estimula el sistema nervioso, se mejora la circulación de la sangre y el flujo linfático, se consolidan y se entonan los músculos y se equilibra el flujo de la energía en la cara. Al mejorar la circulación sanguínea, se estimula la producción de colágeno y elastina, lo que hace mejorar la capacidad de recuperación de las células de la piel y así reflejarse en una piel más tersa y con menos manchas. Se consigue la sensación de que la piel se despierta.Este masaje es diferente de cualquier otro masaje facial. La mayoría de los métodos utilizados en Occidente solo trabajan la superficie de la cara para relajar y restaurar los tejidos finos. El MASAJE FACIAL JAPONES KOBIDO se centra en la condición de la piel, los músculos subcutáneos y el Qi, la energía vital. El propósito de este masaje es trabajar de forma específica y precisa con los meridianos faciales y puntos de acupresión para alcanzar un equilibrio en la piel del rostro y los músculos faciales.La técnica del KOBIDO es una rica combinación de: movimientos de percusión rápidos, amasamiento, Shiatsu, golpecitos, drenaje linfático manual y terapia de los meridianos y puntos de acupuntura, que tratarán las zonas de cuello, escote, rostro y cuero cabelludo.
En función del estado de la piel y músculos faciales y hábitos de la persona (alimentación, fumar, ritmo de estrés, hidratación…), serán convenientes una asiduidad u otra de sesiones en el tratamiento.
Contraindicaciones
- En casos de acné
- Enfermedad contagiosa por vía respiratoria: gripe, tuberculosis…
- Cirugía estética reciente en cuello o cara
- En caso de alergia a algún producto facial
En caso de estar recibiendo tratamiento de Botox, Ácido hialurónico…pues con el tratamiento Kobido, se van a expulsar los componentes de estos tratamientos.